Fuentes de la Casa Rosada manifestaron su distanciamiento de las críticas públicas realizadas por Mauricio Macri, titular del PRO y socio de la coalición de gobierno, respecto a los recientes cambios en el Gabinete nacional, en un contexto de evidente tensión en el vínculo político.

"Macri no nos importa", sintetizó un importante funcionario a esta agencia, luego de que el expresidente mostrara su disconformidad con la designación de Manuel Adorni como jefe de Gabinete. Desde el entorno del presidente Javier Milei se desestimaron sus cuestionamientos, con un colaborador cercano al jefe de Estado señalando: "Tiene 3 diputados y el 80% de la imagen negativa, que se ubique".

La relación entre ambos líderes se habría debilitado luego de que Macri se enterara durante una cena en Olivos los cambios ministeriales e intentara resistir el nombramiento de Adorni. Horas después, a través de su cuenta de X, el expresidente hizo pública una propuesta alternativa, sugiriendo al actual titular de YPF, Horacio Marín, para el cargo. "Enojado no estoy, no lo estuve nunca. Salí decepcionado", insistió Macri el pasado martes en un foro organizado por ABECEB.

Un interlocutor del Gobierno detectó lo que calificó como contradicciones en la conducta del socio político. "Un día te tira una bomba y al otro te halaga. Ahora transitamos el primer momento", sostuvo la fuente, en referencia a que, 24 horas después de su rechazo público a la designación de Adorni, Macri elogió el nombramiento de Diego Santilli como ministro del Interior.

"Macri actuó en caliente. Fue un error proponer un reemplazo. Encima fue contradictorio porque pidió que Francos no se fuera, pero ya tenía un nombre para reemplazarlo. Todo desprolijo", agregó una fuente oficial, quien reveló que el propio Horacio Marín llamó para aclarar que no tenía relación con la postulación que Macri había hecho en redes sociales.

Según las fuentes consultadas, Macri reclama además el desembarco de referentes del PRO en áreas estratégicas del Gobierno, una postura que encontraba atención en el exjefe de Gabinete Guillermo Francos, pero que habría quedado sin su principal aliado interno tras su salida.