Singapur es uno de los países con las leyes más estrictas (y a veces un poco absurdas) que existen. Sin embargo, este alto grado de disciplina hace que este pequeño estado destaque por su impecable limpieza, seguridad, orden y un nivel de criminalidad bajísimo.

La ley en Singapur es especialmente dura con el tráfico de drogas. Los castigos para el incumplimiento de las normas van desde multas, azotes, encarcelamiento y hasta la pena capital. Una frase muy famosa en Singapur dice lo siguiente: si tratas de entrar en el país con droga, eres oficialmente la persona más estúpida del mundo. Por lo tanto, ni se te ocurra traer droga a Singapur, ya que la pena de muerte se aplica tanto a singapurenses como a extranjeros.

Aquí tienes algunas de las leyes y normas de conducta más importantes que debes conocer si quieres viajar a Singapur.

Los chicles

Está prohibida la venta de goma de mascar así como tirarla al suelo o pegarla en cualquier sitio. En algunas guías de turismo dicen que está prohibido mascar chicle, sin embargo, no es verdad. Mascar chicle con fines médicos está permitido sin embargo no encontrarás chicles a la venta en ningún sitio.

Fumar

Fumar está prácticamente prohibido en todos los sitios públicos. De hecho, sus duras leyes antitabaco han hinchado su precio y es bastante caro. Solamente se puede fumar en sitios exteriores muy concretos (y a veces escondidos). Podrás reconocer estos lugares designados, ya que muchas veces hay gente fumando dentro o simplemente hay ceniceros permanentes.

Fumar en el lugar equivocado o tirar la colilla al suelo son infracciones graves. La posesión, importación y venta de cigarrillos electrónicos o vaporizadores también están prohibidos en Singapur. Si te atrapan trayendo tabaco a Singapur puede que te hagan pagar impuestos.

Besarse en público

Darse un pequeño beso en la vía pública no está prohibido. Sin embargo, los besos apasionados y otras muestras efusivas de cariño pueden considerarse falta al decoro, por lo que pueden ponerte una multa.

Comer o beber en el subte

Esta norma es una de las más importantes que debes recordar, ya que es fácil pasarlo por alto y muchos turistas son multados por ello. No bebas nada ni comas en el subte, ni en el andén o en los pasillos.

Cuando estés en el subte compórtate de forma educada, no se puede gritar, cantar o "molestar" en general. En el subte hay unos botones (tanto en los vagones como en los pasillos) con los que los propios viajeros pueden informar de alguna irregularidad. Además, en el subte hay cámaras de vigilancia.

Cruzar mal la calle

Respeta los pasos de cebra. Si te atrapan cruzando una calle fuera del paso de peatones o con el semáforo en rojo te pueden multar, de hecho, la pena puede llegar incluso a los 3 meses de prisión.

Transportar una fruta especial

El durián es una fruta originaria de Asia famosa por tener un olor tan fuerte que resulta desagradable. De hecho, se la considera la fruta más apestosa del mundo. Verás que en Singapur hay tiendas especializadas en la venta de esta fruta (sobre todo en mercadillos y en el barrio chino).

Debido a su mal olor, está prohibido llevar durián en el transporte público y en la mayoría de hoteles. Verás el símbolo del durián tachado en muchos sitios. Ahora ya sabes a lo que se refiere.

Tocar instrumentos o hacer espectáculos en la calle

Para poder tocar un instrumento en las calles de Singapur hace falta una licencia. Además, solo se puede hacer en lugares específicos. Si eres de estos viajeros que tocan en las calles para ganar algo de dinero, ni se te ocurra algo así en Singapur, la multa puede llegar a los 20.000 dólares.

Dar comida a las palomas

Alimentar a las palomas en la plaza puede que sea algo normal en tu ciudad. Pero en Singapur, esta acción está prohibida desde 1973 debido a la propagación de algunas enfermedades. La multa puede ser de hasta U$S 500.

Más leyes y prohibiciones

Escupir en público puede hacerte acreedor a una multa de hasta U$S 735.

Si olvidas bajar la tapa del inodoro en un baño público y te descubren puedes ser consignado a las autoridades.

No se pueden cantar canciones obscenas en público o molestar a alguien tocando mal un instrumento musical, está penado por la ley.

Navegar por internet usando el wifi del vecino es considerado delito y puede llevarte hasta tres años de cárcel.

Andar desnudo dentro de casa/hotel con las cortinas abiertas puede costarte desde U$S 150 de multa hasta tres meses de cárcel.

Las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo son ilegales. Aunque esta ley no se aplica demasiado, se puede decir que el colectivo LGBT de Singapur carece de derechos y de una protección real contra la discriminación.

El vandalismo callejero, en todas sus formas, y pintar gratifi está castigado con cárcel y azotes.

El respeto religioso y racial es un tema muy serio en Singapur. Todo lo que se considere racista o intolerante puede ocasionarte una fuerte multa o prisión de hasta tres años.

No se pueden tirar petardos ni cohetes.

Si ves una flor o una planta bonita, ni se te ocurra arrancarla, porque quizás debas pagar U$S 500 por ese delito.

Imaginar o desear la muerte del presidente es un acto punible incluso con la pena de muerte. La ley es un poco menos severa si piensas en hacer daño a otros miembros del gobierno, lo máximo que pudieras enfrentar es a la cadena perpetua.

Fuente: Clarín, Viajarsingapur.com y otros