El Gobierno nacional oficializó este martes, mediante el Decreto 444/2025, el pago de un bono extraordinario de $70.000 para jubilados que perciban el haber mínimo, elevando el ingreso total a $379.298 en julio. La medida busca compensar los efectos de la inflación en los haberes previsionales, especialmente tras las críticas a la fórmula de movilidad vigente desde 2021.

El bono se aplicará de forma escalonada: quienes cobren exactamente el mínimo ($309.298) recibirán los $70.000 completos, mientras que aquellos con haberes superiores al mínimo pero inferiores a $379.298 obtendrán la diferencia necesaria para alcanzar ese monto. Por ejemplo, un jubilado que perciba $350.000 recibirá $29.298 de complemento. El beneficio es no remunerativo y no está sujeto a descuentos.

En los considerandos del decreto, el Ejecutivo argumentó que la Ley 27.609 (de movilidad jubilatoria) no protegió a los adultos mayores de la inflación, generando "graves desfasajes" entre los precios y los haberes. Por ello, desde 2024 se implementaron bonos mensuales, primero de $55.000 y luego de $70.000 desde marzo de 2025.

El beneficio alcanza a titulares de prestaciones contributivas, pensiones no contributivas y beneficiarios de la PUAM. El texto aclara que, en casos de pensiones con múltiples copartícipes, se considerarán como un único titular para el cálculo. La ANSES será la encargada de liquidar el bono, que se suma a los haberes de julio sin afectar otros derechos previsionales.