Hugo Benejam, referente de la Cámara de Frigoríficos del NOA, reveló que los precios de la carne en Tucumán solo aumentaron entre 7% y 8% en los últimos meses, muy por debajo del 36% registrado a nivel nacional. El dirigente atribuyó esta moderación a dos factores clave: la caída del 40% en las exportaciones a China —que liberó stock para el mercado interno— y el bajo poder adquisitivo de los consumidores locales. "La gente no tiene capacidad para pagar más, y el calor afecta la demanda", explicó.

Sobre el levantamiento del cepo cambiario, Benejam aclaró que no tuvo impacto directo en los valores de la carne, ya que estos dependen principalmente de la ley de oferta y demanda. "El dólar libre no cambió nuestra dinámica porque el precio lo fija el mercado interno", señaló. Sin embargo, admitió que la merma en las ventas al exterior —principalmente por menores compras chinas— ha generado un excedente que evita alzas más pronunciadas.

El consumo, según el empresario, "bajó muchísimo" debido a las altas temperaturas y la contracción del ingreso real de las familias. A diferencia de otras regiones, donde los cortes premium lideraron las subas, en el NOA los frigoríficos priorizan mantener precios accesibles para no ahuyentar a los compradores. "Los valores están acomodados al bolsillo de la gente", insistió.

Aunque Benejam no anticipó cambios significativos a corto plazo, advirtió que el sector enfrenta un "equilibrio frágil": si las exportaciones no se recuperan, la sobreoferta podría presionar a la baja los precios, pero con márgenes ya ajustados por los costos de producción. "Hoy el desafío es sostener la actividad sin perder rentabilidad", concluyó.