En medio del conflicto con gobernadores por el veto a la ley que establecía una reforma en la distribución de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), el Gobierno nacional transfirió el pasado viernes $12.500 millones a cuatro provincias por este concepto, según un informe de la consultora Politikón Chaco.

Las provincias beneficiadas fueron Misiones ($4.000 millones), Entre Ríos ($3.000 millones), Santa Fe ($3.000 millones) y Chaco ($2.500 millones). El reporte indica que si bien aún no se conoce la emergencia específica que motivó estos envíos, el hecho adquiere relevancia por producirse en un contexto de conflicto por este mismo instrumento y porque supera ampliamente los $3.000 millones transferidos durante todo agosto.

Distribución en provincias aliadas y opositoras

El análisis destaca que Entre Ríos es la provincia que más ventaja obtuvo en los últimos meses, al recibir el único ATN de agosto y sumar otro en septiembre, totalizando $6.000 millones en dos meses. Cabe recordar que en esta provincia existe una alianza electoral entre el oficialismo provincial y nacional: el gobernador Rogelio Frigerio cerró acuerdo con La Libertad Avanza (LLA) y presentan candidatos en conjunto, con representantes oficialistas como cabezas de lista para Diputados y Senadores.

Situación similar ocurre en Chaco, otra de las provincias beneficiadas, donde LLA va en alianza con el oficialismo local y los cabezas de lista son del espacio libertario. Frigerio y el gobernador chaqueño Leandro Zdero fueron dos de los tres invitados a la primera reunión de la Mesa Federal convocada por el Gobierno nacional tras la derrota electoral en Buenos Aires.

En contraste, las otras dos provincias beneficiadas -Santa Fe y Misiones- mantienen una relación diferente con el oficialismo nacional. Sus gobernadores no fueron convocados por la Casa Rosada para la Mesa Federal y sostuvieron importantes críticas hacia el Gobierno nacional en el último tiempo, además de no tener alianzas electorales en sus distritos.

El otorgamiento de estos ATN se produce en un contexto de tensiones entre el Ejecutivo nacional y los gobiernos provinciales luego del veto presidencial a la ley que reformaba el sistema de distribución de estos fondos, y apenas días después de la derrota electoral oficialista en la provincia de Buenos Aires.