La muerte de una pasajera que viajaba en una motocicleta contratada a través de una aplicación ha reavivado con urgencia el debate sobre la regulación de estas plataformas en los municipios del interior tucumano. El trágico suceso ha acelerado definiciones políticas en Yerba Buena y Concepción, donde los concejos deliberantes analizan proyectos con enfoques divergentes en alcance, requisitos y responsabilidades.

En Yerba Buena, el concejal Mauricio Argiró, autor de una de las iniciativas en estudio, fue categórico al marcar los límites de su propuesta, la cual excluye expresamente a las motocicletas del sistema de transporte por aplicaciones. Argiró sostuvo que incorporar motos no sería una alternativa adecuada y advirtió que su habilitación podría agravar los problemas de circulación y seguridad vial. Su proyecto apunta a un esquema similar al vigente en San Miguel de Tucumán, con la creación de un registro de conductores, controles sobre licencias y verificación de antecedentes penales. El edil remarcó además la necesidad de avanzar hacia criterios comunes entre municipios para evitar normativas fragmentadas en el área metropolitana.

En paralelo, en la ciudad de Concepción el debate avanza con mayor amplitud. El Concejo Deliberante analiza el proyecto presentado por el concejal Franco Morelli, que busca ordenar el funcionamiento de las aplicaciones con requisitos más estrictos, como la exigencia de licencia profesional categoría D1 y un límite de antigüedad de diez años para los vehículos. La iniciativa propone también restringir la radicación de los choferes, estableciendo que solo puedan prestar el servicio personas domiciliadas en Concepción.

Sin embargo, el reciente accidente expuso un vacío normativo: el proyecto original de Morelli no contemplaba el uso de motocicletas. Ante ese escenario, el concejal Nelson Portugal impulsó una nueva iniciativa, debatida en la última sesión, que incorpora específicamente a las motos y establece la obligatoriedad de un registro municipal, seguros que cubran a conductor y pasajero, y un carnet habilitante. Para Portugal, hechos como el ocurrido funcionan como una señal de alerta que obliga a los municipios a acelerar la reglamentación.

Así, mientras Yerba Buena se inclina por dejar fuera a las motocicletas y priorizar un esquema restrictivo y coordinado a nivel metropolitano, Concepción discute un modelo más amplio que busca abarcar todas las modalidades, con fuertes exigencias en materia de habilitación y responsabilidad local. La tragedia ha dejado en evidencia la urgencia de reglas claras para un servicio que ya es parte de la movilidad cotidiana en las ciudades tucumanas.