El lavado de manos con agua y jabón se consolida como una de las prácticas más efectivas y económicas para prevenir enfermedades, en el marco del Día Mundial del Lavado de Manos que se conmemora este 15 de octubre. Las manos constituyen uno de los principales vehículos de transmisión de bacterias, virus y otros gérmenes responsables de diarreas, infecciones respiratorias, neumonías y complicaciones hospitalarias.

La Dra. Valeria El Haj, directora médica nacional de Ospedyc, señaló que según datos de la Organización Mundial de la Salud y UNICEF, "tres de cada diez personas en el mundo no cuentan con instalaciones básicas para lavarse las manos en sus hogares, y dos de cada cinco escuelas carecen de servicios de higiene adecuados, lo que afecta a más de 800 millones de estudiantes".

La especialista añadió que "cada año, la falta de higiene de manos está asociada a casi 400.000 muertes por diarrea y más de 350.000 muertes por infecciones respiratorias agudas, cifras que reflejan la magnitud del problema".

Frente a esta realidad, la higiene de manos se presenta como una medida simple y efectiva para prevenir enfermedades infecciosas, incluyendo las Enfermedades Transmitidas por Alimentos como el síndrome urémico hemolítico (SUH), salmonelosis y shigelosis.

Para que el lavado sea realmente efectivo, la Dra. El Haj explicó que "debe durar al menos entre 20 y 30 segundos, asegurándose de cubrir todas las superficies: palmas, dorsos, entre los dedos, uñas, pulgares y muñecas". Respecto al alcohol en gel, la especialista manifestó que "es una alternativa útil cuando no hay agua y jabón disponibles, nunca reemplaza completamente al lavado de manos".

La profesional concluyó que "la invitación es clara: incorporar este hábito en la vida cotidiana, en los hogares, las escuelas, los trabajos y los centros de salud". Sostuvo que "no se trata sólo de una medida de higiene personal, sino de un compromiso colectivo con la salud pública" y recomendó lavarse las manos "en momentos específicos —como antes de comer, después de ir al baño, al llegar a casa o antes de atender a un niño o a una persona enferma—".