Un hecho inusual conmovió la agenda política tucumana este miércoles cuando una mujer le robó el teléfono celular al gobernador Osvaldo Jaldo durante un acto público en La Cocha. El incidente ocurrió mientras el mandatario saludaba a vecinos tras inaugurar una oficina de Atención Primaria Jurídica. Las cámaras de prensa captaron el momento en que la mujer, identificada como L.N.C., aprovechó el tumulto para sustraer el dispositivo del bolsillo del saco del gobernador.

Horas después, la sospechosa se presentó voluntariamente en la comisaría local, aparentemente para "aclarar" lo sucedido. Sin embargo, por orden del fiscal Fabián Assad, quedó detenida mientras avanza la investigación por hurto. Fuentes oficiales confirmaron que el teléfono ya fue recuperado. "Fue un exceso de confianza del gobernador y una maniobra rápida de la autora del hecho", señalaron desde el entorno gubernamental.

El robo se descubrió cuando Jaldo, al subir a su vehículo, notó la falta del dispositivo. Su equipo de seguridad revisó las grabaciones de los fotógrafos presentes y detectó a la mujer introduciendo la mano en el bolsillo del mandatario. Vecinos la reconocieron y la policía dio con su domicilio en Los Pizarros, donde encontraron el teléfono.

Tras recuperar el aparato, el gobernador debió dar de baja su línea y luego reactivarla. La causa quedó a cargo de la Brigada de Investigaciones y la Regional Sur de la policía tucumana. El fiscal Assad definirá en las próximas horas la formulación de cargos contra la detenida, mientras el caso se tramita en el Centro Judicial de Concepción. Un episodio que mezcla descuido, audacia y un final poco común en la historia política provincial.