El viceministro iraní de Asuntos Exteriores, Majid Takhet-Ravanchi, advirtió esta noche que su país "hará lo necesario" para defenderse si Estados Unidos decide intervenir en el conflicto en apoyo a Israel. En declaraciones a CNN, el funcionario aseguró que, de producirse una escalada, Irán no tendrá "las manos atadas", en alusión a posibles ataques contra bases estadounidenses en la región.

Aunque no ofreció detalles concretos, fuentes cercanas al gobierno iraní sugieren que podrían ser objetivo instalaciones militares de EE.UU. en países como Irak, Qatar, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos. Ravanchi acusó a Washington de colaborar con Israel pese a sus declaraciones públicas de neutralidad: "Dijeron que no tenían nada que ver, lo cual no es cierto", afirmó.

El viceministro también se refirió a la posibilidad de un ataque israelí o estadounidense contra la planta nuclear de Fordow, una instalación subterránea de enriquecimiento de uranio en Qom. Según Ravanchi, cualquier acción militar contra este tipo de infraestructuras sería "un delito" según el derecho internacional y los protocolos de la OIEA (Organización Internacional de Energía Atómica).

Fordow, un complejo fuertemente custodiado y con acceso restringido, es clave en el programa nuclear iraní. Las declaraciones de Ravanchi reflejan la creciente tensión en la región, donde cualquier movimiento militar podría desencadenar una respuesta inmediata de Teherán. Mientras tanto, la comunidad internacional sigue de cerca el desarrollo de este conflicto con ramificaciones globales.