Javier Milei se refirió por primera vez al fallo que confirmó la condena a Cristina Kirchner durante una clase magistral en la Universidad Hebrea de Jerusalén, ante cientos de estudiantes. "Al ser el primer presidente que no interfiere con la Justicia, los resultados están a la vista", afirmó, en alusión a la sentencia por los negociados con Lázaro Báez. El aplauso del auditorio siguió a su defensa de la autonomía judicial: "Todo es mérito de la Corte Suprema".

El Presidente evitó comentarios públicos inmediatos tras conocerse el fallo, pero cerca de la medianoche local publicó un lacónico mensaje en X. Su discurso en Jerusalén, sin embargo, resonó como un guiño político a Israel, donde persiste el rechazo al memorando de CFK con Irán (2013) para archivar la causa AMIA. David Hatchwell, de la Fundación Genesis, lo destacó al entregarle a Milei el "Nobel Judío", subrayando su alineamiento con Israel tras el 7-O.

Hoy a las 17 (hora local), Milei y el premier Benjamin Netanyahu firmarán en el hotel King David un Memorando de la Democracia y la Libertad, negociado por el canciller Diana Mondino y el embajador Eyal Wahnish. El texto —custodiado con detectores de metales y perros antiexplosivos— busca reforzar la alianza bilateral y contrasta explícitamente con el acuerdo de 2013, que Milei calificó de "pacto con terroristas".

Tras la firma, el Presidente viajará a Madrid, última escala de su gira. Su balance en Israel incluyó no solo el premio Genesis —"soy griego y judío en espíritu", citando a Borges— sino también una narrativa geopolítica que vincula la condena a CFK con su propia defensa de la justicia "sin atajos". Un mensaje claro, tanto para Argentina como para Tel Aviv.