Las distintas facciones del bloque de diputados nacionales del PRO, liderado por Cristian Ritondo, se reunieron este martes en un clima de alta tensión tras la contundente derrota electoral en la Ciudad de Buenos Aires. Aunque se especulaba sobre una posible ruptura, especialmente en el sector más cercano al Gobierno, durante el encuentro se descartó un quiebre inmediato. "No se rompe el bloque", aseguraron fuentes ritondistas, intentando apagar los rumores.

Ritondo, quien también preside el PRO bonaerense, tiene la tarea de negociar una posible alianza con La Libertad Avanza para las próximas elecciones. Desde su sector afirmaron que comparten "muchísimo más en común que los desacuerdos", en un intento por atenuar las divisiones internas. Sin embargo, la ausencia de Silvia Lospennato, candidata derrotada en CABA y cercana a los Macri, reflejó las tensiones no resueltas.

En la reunión estuvieron presentes representantes de las principales líneas internas: María Eugenia Vidal por el macrismo, Álvaro González por el larretismo, y figuras del bullrichismo como Damián Arabia y Fernando Iglesias. También asistieron diputados con perfil independiente pero afines al Gobierno, como Diego Santilli y Alejandro Finocchiaro.

Respecto a la sesión parlamentaria de este miércoles, el bloque acordó no dar quórum, argumentando que no apoyarán iniciativas que "atenten contra el orden fiscal". No obstante, hubo matices: Álvaro González y Héctor Baldassi mantienen una postura más confrontativa, dejando en claro que las diferencias internas siguen vigentes. "Mañana veremos", fue la escueta respuesta de González a la prensa.