El Índice de Confianza en el Gobierno (ICG) que elabora la Universidad Torcuato Di Tella registró en abril una caída del 3,7% respecto a marzo, ubicándose en 2,33 puntos sobre 5. El dato refleja el quinto mes consecutivo de retroceso y se sitúa un 4,8% por debajo del nivel de abril de 2024. Pese a esto, el promedio del gobierno de Javier Milei (2,51) supera al de sus predecesores: Néstor Kirchner, Cristina Fernández, Mauricio Macri y Alberto Fernández.

El deterioro afectó a los cinco componentes del índice: la preocupación por el interés general lideró las bajas (-9,7%), seguida por la evaluación general del gobierno (-4,9%) y la capacidad para resolver problemas (-3%). En tanto, la honestidad de los funcionarios (-1,5%) y la eficiencia en el gasto público (-0,2%) mostraron caídas más moderadas. La encuesta, realizada entre el 3 y el 11 de abril en 39 localidades, capturó el clima social previo a la eliminación del cepo cambiario, un dato clave para interpretar la tendencia.

En comparación histórica, el ICG actual es 10,7% menor que el registrado en abril de 2017 (gobierno de Macri) pero 34,5% mayor que el de abril de 2021 (gestión de Fernández). Este contraste subraya la polarización de la opinión pública: mientras sectores anti-kirchneristas aún valoran el rumbo, otros grupos muestran creciente descontento por la falta de mejoras concretas en el poder adquisitivo.

El informe confirma que la desaceleración inflacionaria no bastó para revertir la percepción ciudadana. Con un promedio aún superior al histórico, el Gobierno enfrenta el desafío de traducir los logros macroeconómicos en bienestar tangible antes de que el malhumor social erosione su capital político. Los próximos meses, con la implementación de nuevas medidas económicas, serán clave para definir si la curva del ICG logra repuntar.