A los 88 años de edad, falleció en la Casa Santa Marta del Vaticano el Papa Francisco. La noticia fue anunciada por el cardenal Kevin Farrell, camarlengo de la Iglesia, quien destacó la dedicación del pontífice al servicio de la Iglesia, especialmente hacia los más pobres y marginados.​

Jorge Mario Bergoglio, nacido en Buenos Aires en 1936, fue el primer papa latinoamericano y jesuita. Su elección en 2013 marcó un hito en la historia de la Iglesia. Durante su pontificado, promovió reformas en la Curia, luchó contra la pederastia, apoyó la inclusión de las mujeres y se mostró abierto respecto a la homosexualidad. Su enfoque pastoral se centró en la misericordia, la inclusión, la pobreza y el cuidado del medio ambiente.​

El Papa Francisco había estado hospitalizado recientemente debido a una neumonía grave, de la cual fue dado de alta el 23 de marzo. A pesar de su delicado estado de salud, participó en la misa de Pascua y ofreció la bendición "Urbi et Orbi" desde el balcón de la Basílica de San Pedro, en lo que fue su última aparición pública.​

Con su fallecimiento, se inicia el período de "sede vacante" en la Iglesia Católica. El cónclave para elegir a su sucesor deberá celebrarse entre 15 y 20 días después del inicio de este período. Francisco será enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor, cumpliendo su deseo de humildad.​

El legado del Papa Francisco perdurará como el de un líder espiritual y político del siglo XXI, que buscó una Iglesia más cercana a los fieles y comprometida con los desafíos del mundo contemporáneo.