En un contexto de expectativa por las elecciones del próximo 26 de octubre, la reunión de Labor Parlamentaria del Senado que estaba prevista para este martes 14 de octubre fue pospuesta, eliminando de forma efectiva la posibilidad de que la Cámara alta sesione en el corto plazo. Se estima que el recinto no se abrirá, como mínimo, hasta finales de este mes o inicios de noviembre.

La cumbre entre jefes de bloque, que había sido fijada por escrito en la reunión anterior hace quince días, fue comunicada con horario durante la mañana del lunes. Sin embargo, luego del mediodía la voluntad general de los bloques cambió hacia dilatar el encuentro.

Entre los motivos que se esgrimieron para la postergación figura una postura contraria del sector “dialoguista” a sumarse a una agenda impulsada a toda velocidad por el kirchnerismo antes de los comicios. El temario que pensaba llevar el Frente de Todos, que conduce José Mayans, incluía iniciativas que requerirían dos tercios de los votos para ser habilitadas sobre tablas, un apoyo que ningún bloque parecía en condiciones de garantizar.

Adicionalmente, se señaló que los proyectos en cartera lesionarían de manera interna a varios espacios políticos, enfrentando lo que se describió como un “feroz lobby” que promete oponerse a su avance.

Mientras el pleno del Senado permanece virtualmente inactivo, la agenda de comisiones para la semana incluye eventos que no eluden la polémica. Para la tarde de este martes se conformará la bicameral de análisis de privatizaciones, donde se anticipan críticas de la oposición al Gobierno. Para el miércoles está prevista una reunión informativa sobre biocombustibles, un tema que ha generado tensiones entre el sector del campo y las petroleras.

Quedan a la espera de ser convocados, entre otros, el proyecto que modifica el tratamiento de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU). La iniciativa, que ya recibió media sanción del Senado, establece un plazo de 90 días corridos para su aprobación con “mayoría absoluta” por ambas Cámaras. La Cámara de Diputados le dio validación general la semana pasada, pero modificó el artículo clave que establece el plazo de los 90 días, el cual no alcanzó la mayoría absoluta requerida. Por este motivo, el Senado deberá insistir con su versión original o tratar la propuesta devuelta por Diputados.

Para el miércoles también está pactado un plenario de las comisiones de Ciencia y de Energía para analizar un proyecto del propio Mayans que declara de “interés público y estratégico no enajenable el Desarrollo Nuclear Argentino”. Desde su bancada y otras afines se apuesta a acelerar su tratamiento para que pase rápidamente a la Cámara de Diputados.