El gobernador Osvaldo Jaldo confirmó que el próximo martes 16 de septiembre quedará inaugurada la segunda y última etapa del servicio penitenciario de Benjamín Paz, una obra que calificó como sin precedentes en la Argentina reciente y que demandó una fuerte inversión de las arcas provinciales.

Durante una conferencia de prensa celebrada este mediodía, el mandatario provincial detalló que la nueva etapa incluye "cuatro pabellones más, 800 plazas adicionales que sumadas a las 800 que ya tenemos llegamos a mil seiscientas plazas en total". Jaldo enfatizó que "ninguna provincia de la República Argentina, en este año y nueve meses, tiene un establecimiento carcelario de estas características, hecho a nuevo como lo tiene Tucumán".

La obra, ubicada en el departamento Trancas, atravesó demoras y problemas de financiamiento durante su construcción. El gobernador reconoció que "nos costó mucho esfuerzo, mucho sacrificio. Hicimos un gran esfuerzo financiero, porque los recursos de la Nación estaban atrasados. La provincia empezó a poner una cuota aparte y hoy, gracias a Dios, la estamos terminando".

El complejo penitenciario permitirá descomprimir la situación de las comisarías tucumanas, que inevitablemente eran utilizadas como lugares de detención transitoria por falta de espacio en la Cárcel de Villa Urquiza, que supera los 100 años de antigüedad. "Con esto vamos a alivianar las comisarías y a tener más policías en la calle para tareas de seguridad preventiva", explicó Jaldo.

Con la finalización de esta segunda etapa, Benjamín Paz se consolida como el establecimiento penitenciario más grande y moderno del país. El gobernador describió el proyecto como una iniciativa que busca "además de ampliar la capacidad de alojamiento, mejorar las condiciones de detención y reforzar el sistema de seguridad provincial".

La inauguración de la segunda etapa había sido adelantada el miércoles 3 de septiembre por el ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, luego de dejar inaugurada el Área de Infantería en Las Talitas.