Los registros de la Dirección General de Rentas (DGR) revelan que Tucumán recaudó $515 mil millones en el primer semestre del año, alcanzando el 85.7% de los $601.8 mil millones presupuestados para todo 2025. Este desempeño, que representa un crecimiento interanual del 80.4%, supera ampliamente las proyecciones oficiales y reabre el debate sobre la administración de los recursos provinciales.

El detalle muestra que el Impuesto sobre los Ingresos Brutos aportó el 80.3% del total ($413.7 mil millones), seguido por el Impuesto a los Sellos (10.83%) y Salud Pública (3.52%). Solo en junio, la provincia recaudó $94.6 mil millones, un 65% más que en igual mes de 2024, marcando un récord que anticipa que la recaudación anual podría duplicar las estimaciones iniciales.

Discrepancias presupuestarias

Durante el tratamiento del Presupuesto 2025, el legislador Claudio Viña (Compromiso por Tucumán) había cuestionado las proyecciones: "¿Cómo justifican $601 mil millones para 2025 si a octubre de 2024 ya habíamos recaudado $557 mil millones?". La diputada Paula Omodeo (CREO) agregó: "Somos la provincia con mayor presión fiscal en relación a su PBI, pero no se traduce en obras como la autopista a Termas o las viviendas en Banda del Río Salí".

Impacto fiscal

Este superávit inesperado ocurre en un contexto donde el 70% de los ingresos provinciales dependen de la coparticipación federal, actualmente en disputa con el gobierno nacional. Expertos advierten que, sin una gestión transparente, los recursos excedentes podrían asignarse ineficientemente, mientras crecen los cuestionamientos sobre su destino final.

El gobierno provincial no ha detallado aún cómo redistribuirá estos fondos adicionales, en medio de un escenario donde la presión por demostrar resultados concretos se intensifica junto con el debate sobre la carga tributaria local.