El gobernador Osvaldo Jaldo reconoció que el encuentro con el senador Juan Manzur durante los festejos patrios podría marcar el inicio de un acercamiento político en el peronismo tucumano, aunque aclaró que no hubo conversaciones partidarias durante el acto. "Los acercamientos institucionales pueden traer entendimiento político", admitió el mandatario, dejando entreabierta la puerta a una posible unidad de cara a las elecciones provinciales.

Jaldo agradeció públicamente la presencia de Manzur —exgobernador y referente de otro sector del PJ— en los actos del 9 de Julio: "Demuestra responsabilidad institucional". Sin embargo, fue categórico al señalar que no abordaron temas electorales durante el encuentro: "El tiempo era para los próceres, no para la política". La salvedad llegó al mencionar que "quizá esta oportunidad facilite en el futuro algún acercamiento".

Consultado sobre el frente "Fuerza Patria" que integran Axel Kicillof, Máximo Kirchner y Sergio Massa en Buenos Aires, Jaldo se desmarcó: "Es un armado bonaerense". Recordó que en Tucumán el peronismo ya tiene su propia alianza (Frente Tucumán Primero) y se mostró cauteloso ante el lanzamiento de otro espacio peronista local: "No sé si es disidente, anti-Milei o de izquierda. Ellos deberán explicarlo".

El gobernador insistió en que desde el PJ tucumano "buscamos la unidad", pero evitó proyectar si el gesto con Manzur se traducirá en una alianza efectiva. "Puede quedar solo en lo institucional o derivar en algo más", afirmó, en lo que analistas interpretan como un mensaje para sondear reacciones internas.

La pulseada por la unidad peronista ocurre en un año clave: Tucumán elegirá gobernador en 2025, y el oficialismo nacional busca capitalizar las divisiones opositoras. Mientras Manzur mantiene silencio, Jaldo maneja los tiempos con una estrategia que combina gestos de apertura con firmeza en su liderazgo provincial.