El Gobierno nacional oficializó este martes la disolución de 21 organismos públicos como parte de su plan de reducción del Estado. La medida, publicada en el Boletín Oficial, afecta a entes clave como la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), el Instituto Nacional de Semillas (INASE) y la Comisión Nacional del Tránsito, cuyas funciones serán absorbidas por diferentes ministerios.

Entre los organismos eliminados figuran también el Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional, las Delegaciones Sanitarias Federales y la Agencia Regulatoria del Cannabis Medicinal (ARICCAME). El decreto argumenta superposición de funciones, falta de resultados y un crecimiento desproporcionado del sector público, que pasó de 35.481 agentes en 2010 a 88.095 en 2024.

Algunas entidades fueron transformadas en unidades ministeriales, como el Instituto Nacional del Cáncer (dependerá de Salud) y el INTI (de Industria). Se creó además la Administración Nacional de Establecimientos de Salud (ANES) para centralizar la gestión de hospitales nacionales como el Posadas y el Bonaparte.

Los bienes ociosos serán transferidos a la Agencia de Bienes del Estado, mientras los fondos disponibles irán al Tesoro Nacional. El personal conservará sus cargos temporalmente, hasta que los ministerios definan las nuevas estructuras organizativas en las próximas semanas.

Esta racionalización estatal busca "optimizar recursos y eliminar duplicidades", según los considerandos del decreto. Las autoridades aseguran que las políticas públicas esenciales continuarán a través de los ministerios correspondientes, con mayor control presupuestario.