Trece gobernadores firmaron un compromiso público para establecer metas anuales de alfabetización, pero Osvaldo Jaldo, mandatario de Tucumán, decidió no sumarse al acuerdo impulsado por Argentinos por la Educación. La iniciativa, respaldada por más de 200 organizaciones civiles, busca que todas las provincias reporten avances en comprensión lectora de alumnos de tercer grado, a partir de 2026.

Los datos explican por qué la adhesión generaría urgencia en Tucumán: según las Pruebas Aprender 2024, solo el 40,4% de los estudiantes de tercer grado alcanzó el nivel esperado en lectura, el peor resultado del NOA. A nivel nacional, tres de cada diez niños tienen graves dificultades, y uno de cada diez no sabe leer. Chaco, Córdoba y Mendoza están entre las 13 provincias que ya se comprometieron a publicar metas y resultados.

Desde Argentinos por la Educación aclararon que la firma es voluntaria y que mantienen diálogo con Tucumán. "Visitaremos la provincia para conocer su estrategia local", adelantaron. Ignacio Ibarzábal, director de la organización, subrayó: "Para mejorar los aprendizajes se necesita compromiso político de alto nivel".

La ausencia de Jaldo contrasta con la crítica realidad educativa tucumana. Expertos insisten en que estos acuerdos deben traducirse en políticas de Estado, independientes de los ciclos políticos. Mientras, la provincia deberá explicar cómo enfrentará su rezago sin sumarse al plan federal que ya articula a la mitad del país.